VICTORIA

Sus anteojos de marco blanco, un esnobismo para la época, son uno de los íconos que la representan. Uno de sus logos. De hecho son casi una firma een el programa que la Unesco entrega de su Villa en San Isidro, donde se realizan actividades culturales y visitas guiadas para saber como vivía la aristócrata fundadora de la revista Sur. En la bella casa de fin de semana de sus padres y a partir de 1941 su hogar cotidiano, hay en la sala de música retratos de Victoria realizados por el pintor francés Pascal Dagnan-Bouveret y otra del uruguayo Pedro Fígari. En un rincón asoma la escultura en bronce que le realizó el príncipe ruso Paul Troubetzkoy en 1914. En el medio, el piano de cola que ejecutó igor Stravinsky, quién le dedicó la ópera ballet Perephóne y que Victoria recitó en el Teatro Colón y en Río de Janeiro en 1934. Además, se regaló un programa con la traducción del texto de la obra realizada por Borges.
De familia de artistócratas. Sus padres Manuel y Ramona se conocieron en el velatorio de Sarmiento. Los Ocampo tenían grandes extensiones de campo en Córdoba y Pergamino, a pocos kilómetros fundaron el pueblo Manuel Ocampo. Y la ciudad de Villa María, en Córdoba fue fundada en terrenos de la familia.
Ramona Victoria Epifanía Rufina Ocampo nació el 7 de abril de 1890 y falleció el 27 de enero de 1979 víctima del cáncer de paladar.
Tuvo cinco hermanas: Angélica, Pancha, Rosa, Clara (que murió a los 11 años) y la escritora Silvina Ocampo, que se casará con Adolfo Bioy Casares. En aquellos tiempos, las niñas de alcurnia no iban a la escuela. Eran educadas por institutrices y el primer idioma que aprendían era el francés, luego el inglés y por último es español.
En 1912 se casó con Bernardo de Estrada y se fueron dos años de luna de miel por el Caribe, Estados Unidos y Europa. En Roma se enamoró del primo de su esposo, Julián Martinez, con quien tuvo un romance apasionado.
En 1916 conoció al filósofo José Ortega y Gasset y planearon la creación de Sur, dónde publicó los cuentos de un jóven y desconocido Borges, así como diversos autores latinoamericanos y europeos. La revista era financiada exclusivamente por Victoria. El primer número salió en el verano de 1931 y el último, en 1992. En ese período se publicaron 371 ejemplares.
Fue la primera mujer miembro de la Academia Argentina de Letras, fundadora de uno de los más antiguos movimientos feministas de Argentina, la Unión de Mujeres en 1936 y directora del Fondo Nacional de las Artes de Argentina. En la biblioteca de su casa hay 11.500 libros: 5.000 en francés, 3.500 en inglés y 3.000 en español. En uno de los tesoros que se conservan: la tesis con la que se recibió el psicoanalista Jaques Lacán, se lee: "A Victoria, esta obra que no es más que una primera piedra, pero que yo amaría que usted recibiera con indulgencia en su jardín". Se dice que fue amante de cuanto intelectual cruzó por su vida. Sea cierto o no, en uno de los Seminarios del psicoanalista francés quedó escrito de su puño y letra en español: "A Victoria, mujer de este siglo. Unica."

Espero algún día poder ser aunque sea un poquito como mi vecina Victoria.